drunk

Gran noche la de ayer. Una de esas en las que no sabes que es mejor, si hacer memoria y recordar lo que pasó o simplemente vivir sin conciendia de un día.

Comenzó a las 18:30 cuando amanecí de la siesta. Una crema de champis y a comenzar la tarde y noche del jueves!

La gente quedó a las 7 (como siempre), pero yo me presenté a las 9 y media (como siempre también) en la parada del bus con dirección al centro.

Este país te impide llevar tu propio ritmo, todo está programado! Pero yo me revelo!

Después de la lectura de unos capitulitos de "status", y entregar el colchón que llevaba en mi habitación unos 2 meses (desde que llegué), una ducha y a pensar modelito.

Ana, quieres una copa de vino? En la última fiesta se dejaron media botella.

No me da tiempo, contestó ella vía Skype.

OK, se lo diré a mi vecino (Kalle, el sueco rubito). Pero se me olvidó llamarle y vaso tras vaso me bebí la botella...

Salimos del portal y estaba nevando como nunca! Nuestros pies se iban enterrando en la nieve a cada paso, Ana en tacones y yo riéndome de ella. Mi vecino feliz con la nieve, sin capucha el muy valiente!

Por fin llegamos a la parada! El bus llegó después de 7 minutos y al ir a subir, mi pie se enterró en la nieve y me cai... iba en medias... pero ni lo sentí! me reí, se rieron, nos reimos y subimos.

La fiesta continuaba en el autobús, los españoles cantando "Asturias patria querida", yo quería cantar el himno español, como Dios manda!, pero la rubia (Ana), me lo prohibía una y otra vez.

Es típico, habitual y ridículo, que al bajarte del bus corras, cual gacela, hacia "Plata" (la discoteca), con el fin de no hacer cola (10 minutos).

Obviamente nosotras no corríamos, bastante teníamos con luchar con la nieve del suelo y la que no dejaba de caer!

No podíamos mirar a otro lugar que no fuera el suelo, porque si uno de esos millones de copos hubiera caído en nuestros ojos...el rimel corería por mis mejillas cual "Emo de vaya semanita"!!!

Una vez dentro, y con una sidra en la mano, comenzamos a menearnos! Los españoles como buenos patrióticos salieron a beber en la calle (llueva, nieve, haga frío o calor, el español siempre está dispuesto a sufrir por beber¡ Viva el botellón!).

Pero la rubia y yo acojonadas nos hayábamos con esa tormenta blanca, así que nos quedamos dentro haciendo unos pasos de baile.

12 y media, cansada, demasiado "contenta" gracias a esa botella de vino, decidimos abotar la noche e ir dirección: paki-taxi!

Subrealista, ireal, ilegal, acojonante y quizás gracioso. Como si nos encontráramos en el programa "Qué apostamos", entramos 6 individuos además del conductor en un coche, no de grandes dimensiones. Esta es la vida erasmus, si podemos ahorrar, lo hacemos!

En nuestra aventura atravesando nieve, decidí hacerme una sesión de fotos, total no había prisa. Mi pobre "corridor mate" fue el encargado de disparar el flash ytras ésta llegamos a casa.

Hambre? Devorábamos! Decidimos ponernos a cocinar, la 1 y media de la mañana es buena hora para ello.

Él se decantó por algo sano, eso sí, siempre cocinado con mantequilla!, ensalada con tomate y setas. Al rato añadió un huevo y más tarde una hamburguesa... el hambre le podía con la conciencia de comer salubale.

Yo escogí una rápida y calentita pizza.

Hoy los buenos días me los han dado a las 10 y media, mi vecino múcico ha decidio que era muy buena hora para empezar a tocar la maldita guitarra y mi otro vecino ha creido conveniente ponerse a psar el aspirador tempranito... dicen, que a quien madruga Dios le ayuda... gracias por despertarme!

Por supuesto, la señora resaca ha amanecido a mi ladito.